miércoles, 15 de noviembre de 2017

Oooh, ooh, ooooh-oh, oooh, oh, ooooh, ooh, ooooooh, ooooh, oh


Este año 2017 será inolvidable. Sobre todo para los que estuvimos en el lugar adecuado en el momento idóneo (the right place at the right time). En mitad de Mordor, cuando todo había acabado y mientras ellos abandonaban el escenario, y después, y aún mucho después, las masas enfervorizadas nos quedamos gritando: Ooooh-oh, oh-ooh-ooooh-oooh-ooooooo-oh, ooooooh-ooooh… que en castellano se traduce “Con mis rayos refulgiendo / Puedo ver adónde voy”.
Para los no adeptos al Primavera Sound, a Mordor se llega tras un esfuerzo pedestre de miles de pasos. Como se llega a cualquier cosa verdaderamente importante en esta vida. Una vez allí, comienza la batalla en forma de conciertazos y gentes entregadas a la música. Mordor es, hasta ahora, una enorme explanada de tierra al final del infinito recinto que ocupa el festival. Adquirió ese mote desde que un año llovió a mares y aquello se embarró y el personal venido desde todos los rincones de los mapas conocidos, trolls y orcos, elfos, principesas, apicultores y otros especímenes, continuamos con nuestro plan musical previsto.
Como en la novela de Tolkien, vencimos frente a las adversidades y, como siempre pasa en el Primavera Sound, salimos enriquecidos… espiritualmente, claro está.

PAP


PD: Once again, I hope you can understand the lyrics. If you can't, just ask me.